Ya he hablado aquí alguna otra vez de AEDEMO.
AEDEMO es la Asociación que agrupa a los profesionales que nos dedicamos a la investigación de mercados y de opinión. Ahora somos algo más de mil socios.
No somos una profesión demasiado numerosa, pero seguro que todavía hay bastantes personas que no son miembros de AEDEMO porque no conocen bien la Asociación, que este año cumple sus primeros cuarenta de vida.
Ayer se celebró la Asamblea anual, se eligieron nuevos miembros de la Junta Directiva y entre otras cosas se proyectó un video conmemorativo, en el que el maestro Joan Alós, uno de los anteriores presidentes, reflejaba loque han sido estos cuarente años para el mundo, para España y para nuestra profesión.
Va a resultar que, aunque ahora parece que no está de moda decirlo (Sarkozy quería acabar con su memoria) el 68 fue un año importante. Además del mayo francés, de la invasión de Checoslovaquia y la previa primavera de Praga, además de otros muchos acontecimentos que marcaron el año, en España nacieros el Estudio General de Medios (EGM) y AEDEMO, dos hitos sumamente importantes para la investigación social y de medios.
AEDEMO organiza alguno de los Seminarios sobre medios más importantes (el de televisión, del que ya he hablado aquí, es el evento anual más importante para nuestra profesión), también otros sobre eficacia publicitaria o sobre tendencias y varios más sobre otros temas que me pillan algo más lejos.
También publica la revista Investigación y Marketing, una de las más prestigiosas sobre este tema. Ayer se entregaron los remios a los mejores artículos publicados a lo largo del año en la revista. Ricardo Cuéllar de TNS, que sería luego uno de los elegidos como nuevo miembro de la Junta Directiva, ganó el premio senior y Manuela (no recuerdo el apellido, aumque compartí mesa con ella) una chica que trabaja en Millward Brown, el premio al mejor artículo junior.
Yo le tengo mucho cariño a este premio, que recogí el año pasado en la cena que se celebró en Barcelona.
Además de Ricardo, la otra persona que fue elegida como miembro de la Junta fue José Carlos Gutiérrez, que fue mi jefe muchos años (aunque es mucho más joven que yo) y que sigue siendo un buen amigo. Seguro que lo va a hacer muy bien.
Sentí que sólo hubiera dos plazas. También se presentaba Pilar Granados, otra buena amiga, con la que trabajé hace muchos años y que es una gran profesional. También lo habría hecho muy bien.
La Junta Directiva cumple hace muchos años la paridad; no porque se imponga artificialmente sino porque en nuestra profesión contamos con mujeres muy brillantes que han sido elegidas por nosotros. La Presidenta es Maite Rodríguez, otra buena amiga, que ahora está apoyando a los Canales Temáticos desde la empresa Conect, que dirige.
Hola Pedro Muñoz Valencia:
Bienvenido a este mundo de la publicidad y los medios.
Si se suele decir coloquialmente que «el mundo es un pañuelo» imagínate lo que puede llegar a ser el mundo de la investigación de medios. Más aún si lo limitamos a Madrid.
Luego está el caso de los que llevamos más de media vida en esto, que, lógicamente, conocemos a casi todo ese pequeño pañuelo (y a lo mejor hasta os conocen un poco más). Eso no es malo ni bueno, o en todo caso tiende a se más bien bueno.
Todavía estyo en camino de enterarme del todo de qué es esto de Aedemo, porque se podría decir que acabo de entrar de lleno en el mundo de la publicidad. Sin embargo me ha sorprendido el artículo porque dos de las personas citadas (Pilar y Maite) son profesoras mías. Además hace poco leía en el periódico de la Publicidad, también estaba relacionado con usted profesionalmente (Jaime Agulló) tan pequeño es el mundo de los medios??
Un saludo
Y que cumpla otros tantos!!!
A Eduardo le producirá pudor decirlo, pero como el alcohol que destila mi nombre produce desvergüenza yo te lo diré – querido Pedro:
no es que en los medios haya poca gente, es que los buenos se conocen todos.
Y otros, incluso tenemos suerte de también conocer por nuestro lado a los buenos, para ver si se nos pega algo.
Además, sucede una cosa curiosa en medios y es que personas que trabajan en empresas que compiten de manera directa y despiadada en el mercado, se tienen tanto respeto mutuo que todos acaban teniendo una excelente relación.
Cuánta razón, Justerini…