El pasado mes de febrero terminé de leer cuatro libros. Todos de ficción.
Había leído hace unos años Intemperie, la primera obra de Jesús Carrasco, que luego fue llevada al cine por Benito Zambrano, con Luis Tosar como protagonista.. Me gustó cómo estaba escrita, pero me pareció muy dura. Seguramente no le habría dado más oportunidades al autor (a estas alturas de la vida, no está uno para muchos sufrimientos añadidos) pero varios amigos que también leen y que, cuando me han hecho recomendaciones han acertado, me hablaron muy bien de Elogio de las manos, su obra más reciente. Acertaron con el consejo.

El libro es una loa al uso de las manos y una metáfora de la vida. Una historia aparentemente sencilla, la transformación de una casa prestada, para hacerla habitable, sabiendo que en algún momento, que los protagonistas desconocen, lo van a perder todo. A partir de esa idea simple, Carrasco escribe una historia apasionante. El autor escribe muy bien, con un uso fabuloso del lenguaje. Una obra maestra; una maravilla de lectura.
Continué con un libro muy breve, Ensayo general, de Milena Busquets. Se trata de una autobiografía temprana construida a partir de relatos muy cortos. La autora es hija de la editora Esther Tusquets, con la que, al parecer, tuvo una relación complicada. Los relatos son interesantes y variados hasta constituirse en el retrato de una vida, o dos sin contamos la fuerte presencia de la madre.
Se puede leer como una serie de relatos casi independientes, o como un retrato de una época. Yo lo hice así y no me di cuenta de que era una autobiografía, ni de quien era la madre, hasta casi el final. Seguramente no estaba muy lúcido, pero fue interesante leerlo así.

Es un libro bien escrito, que mantiene el interés y se lee rápido. Seguramente buscaré más libros de la autora.
Continué con otro libro breve: Abel, de Alessandro Baricco. Hacía bastantes años que no leía nada de Baricco, al que empecé a leer en el siglo pasado, con aquel ejercicio de estilo que llamó Seda. Luego leí algunos más; esta es mi quinta obra del autor. Abel me ha confirmado la idea que recordaba: sus novelas son muy poéticas, muy diferentes.
Abel Crow, el protagonista, es un sheriff de 27 años… ¿Abel es una novela del oeste? Sí y no. Por el contenido sí lo es, pero por el tono, por el estilo, es muchas cosas más.
El toque poético y filosófico de Baricco lo transforma todo. ¿Las cosas pasan por una causa o el efecto va primero? Un sheriff pistolero empieza a disparar mejor a partir del momento en que deja de disparar.

Las dudas sobre la relación causa-efecto, el tiempo que avanza y retrocede, hacen de Abel un libro sorprendente, curioso, diferente y muy interesante
Mi última lectura del mes fue Pan de azúcar, de Bali Kaur Jaswal. Me lo regalaron mis hermanas, creo que por mi cumpleaños.

La autora vive en un lugar tan exótico como Singapur, pero es de origen punjabí, del norte de la India y de religión sij, dos aspectos que condicionan su vida y la de la protagonista, un trasunto de ella misma.
Se trata de una novela de iniciación , en el Singapur en plena ebullición económica de los años noventa, cuando se produjo el despegue económico de la ciudad estado, un crisol de culturas, razas y religiones.
La protagonista, una niña sij, convive con compañeras chinas, musulmanas y cristianas, de diversas procedencias, en un colegio cristiano tradicional, pero tolerante para la época en la que se desarrolla.
Veinte años antes su madre vivió una historia muy diferente.
Una novela interesante y exótica. Para disfrutar.
Gracias por las reseñas. Todos los libros muy interesantes. Me los apunto.
Gracias a ti, María Ángeles. Siempre me animan tus comentarios.